Son muchos los motivos por los cuales las barbacoas son consideradas los mejores complementos para un jardín o terraza. Las barbacoas convierten tardes aburridas en momentos especiales y dignos de recordar que nos sacan de la rutina durante unas horas para olvidarnos de todo y disfrutar de un rato delante del fuego. Desde hacer la lista de la compra hasta el momento de sentarse alrededor de la mesa, cada parte del proceso de elaboración de una barbacoa es único y memorable.

Por todos estos detalles que hacen de las barbacoas el mejor amigo de tu jardín o terraza hemos de decir que se trata de un complemento esencial que no puede faltar en ninguna casa. Y es que pasar un buen rato con nuestros amigos y familiares no tiene precio y por eso os traemos esta guía, para que puedas seguir sumando inolvidables momentos con tus seres queridos.

Porque es mucho más que una forma de cocinar y siempre es un buen momento para hacer una, te presentamos una serie de consejos y pautas que debes tener en cuenta a la hora de adquirir una barbacoa para que todo salga bien y acabes, literalmente, con un buen sabor de boca.

La barbacoa perfecta

Lo más importante a la hora de elegir una barbacoa es tener en cuenta el espacio disponible para su instalación y el máximo número de personas para las que podemos llegar a cocinar. Es fundamental prever el problema del espacio para evitar que éste aparezca una vez hemos adquirido el producto y ya no hay marcha atrás.

Una vez hemos aclarado este tema, lo siguiente es pensar en la comodidad que ofrece cada modelo y, sobre todo, en la frecuencia con la que vamos a usar la barbacoa ya que no nos dejaremos la misma cantidad de dinero si la vamos a usar una o 25 veces. Otro aspecto clave que mucha gente pasa por alto pero que marca la diferencia entre una barbacoa buena y una no tan buena es la posibilidad de regular la altura de la parrilla ya que esto será clave a la hora de evitar que se nos queme la comida.

Muchas barbacoas portátiles son de gran calidad pero no disponen de mecanismos para transportarlas cómodamente y este es otro gran fallo pues lo bonito de la barbacoa es, precisamente, poder llevártela por ahí de excursión al campo con los amigos.

Los materiales más recomendados para una barbacoa son el hierro, el acero y las aleaciones similares. Estos metales se calientan rápidamente y, sobre todo, mantienen el calor durante más tiempo. La parrilla también debería ser de acero para facilitar al máximo su limpieza e higiene y evitar el óxido y la corrosión.

Si estamos pensando en una barbacoa fija, no portátil, deberíamos priorizar que esta sea capaz de mantenerse firme y segura al piso para tener controlado el fuego en todo momento y de forma segura. Si la instalación está desnivelada existe un alto riesgo de que acabe cediendo y provocando un desastre. Por último, deberíamos pensar en si queremos que nuestra barbacoa sea de carbón, de gas o eléctrica.

Si bien es cierto que las barbacoas de carbón son la opción preferida por su característico sabor, resultan incómodas de encender y utilizan un combustible fósil por lo que cada vez son más las personas que se pasan a los modelos eléctricos y de gas. Las barbacoas de gas son increíblemente fáciles de utilizar y permiten un control total del fuego por lo que son las más seguras con diferencia.

Las barbacoas eléctricas son especialmente útiles cuando disponemos de poco espacio o si queremos colocarla en interiores. Son muy cómodas y prácticas y también permiten un control total sobre la temperatura.