¿Sueñas con hacer una reforma pero no te llega el dinero para pagarla? En este artículo te vamos a mostrar una serie de fórmulas a través de las cuales te será mucho más fácil conseguir el capital que necesitas para hacer frente a ese gasto.

Comienza a ahorrar ahora mismo

La mejor manera de poder afrontar la reforma que tantas ganas tienes de realizar se a través del ahorro. Si eres capaz de ahorrar, en poco tiempo podrás conseguir tener el dinero que necesitas para hacer la reforma.

Hay diferentes métodos de ahorro, pero lo más importante es poder tener fuerza de voluntad y en consecuencia conseguir ahorrar lo que realmente nos hemos propuesto. Para saber cuánto tiempo tardarías en conseguir el dinero, es importante saber cuál sería más o menos el precio de la factura y cuál es la capacidad de ahorro que tienes. Con estos datos podrás saber el número de meses que tendrías que esperar para poder comenzar la obra.

Solicita un préstamo

Si realmente tienes ganas de hacer la reforma y no te puedes esperar más, lo mejor será que solicites financiación para conseguir de manera anticipada el dinero que necesitas.

En el mercado podrás encontrar diferentes tipos de préstamos, como préstamo sin nómina, préstamo reforma, préstamo personal… la verdad es que hay muchas opciones entre las que elegir. Solo tendrás que comparar y elegir la opción que mejor encaje con tus necesidades.

Y recuerda, como nos comentan desde este artículo especializado en préstamos asnef, puedes solicitar dinero incluso si estás en un listado de morosidad como Asnef. Lo importante es que la deuda no sea elevada y sobre todo que el destino del dinero no sea para devolver el dinero con el cual te han registrado en el listado de morosidad. Si buscas información, no te será complicado encontrar el préstamo más competitivo del mercado.

Compara precios entre empresas

Ahorrar o solicitar financiación es muy importante, pero igual de importante es solicitar diferentes presupuestos para tener la certeza de contratar a una empresa que nos va a realizar una buena reforma y a cambio nos va a cobrar lo justo.

No cometas el error de quedarte con la primera empresa de reformas que te encuentres, sino que tienes que solicitar presupuesto. Si comparas, te darás cuenta de que hay un diferencial de precios importante. Gracias a esto, tendrás que pagar mucho menos dinero por la reforma y en consecuencia el esfuerzo económico será más pequeño. Si realmente no quieres esperar más tiempo del debido, compara desde ahora mismo y verás como el ahorro puede llegar a ser importante.

Aprende a gestionarte para ahorrar más

Una buena gestión también te ayudará a ahorrar más. Para conseguirlo, es importante eliminar los gastos extra que no son realmente necesarios. Para que te hagas a la idea, si por ejemplo vas al supermercado, vete con un listado de productos fijos y no te salgas. Si te quitas unos pequeños caprichos, día a día podrás ahorrar y podrás llegar antes al importe que te permitirá disfrutar de la reforma que estás buscando.

Este sistema de ahorro no es fácil de llevar a cabo, debido a que en muchas ocasiones nos dejamos llevar por los caprichos y en consecuencia el sistema fracasa. Con esto no quiero decir que te sacrifiques al máximo y no vivas hasta conseguir el dinero necesario. Sino que tienes que aprender a controlarte para tener éxito dentro del ahorro.

Haz un inventario de gastos y elimina los innecesarios

Finalmente, te recomiendo hacer un inventario de gastos. A través de esa revisión de gastos podrás ver cuáles son los gastos realmente necesarios y los que no lo son. Si eres capaz de encontrar gastos innecesarios y los puedes eliminar, así podrás llegar a conseguir el dinero del presupuesto en un periodo de tiempo mucho más pequeño.

Estos gastos los podrás retirar mientras estés en periodo de ahorro y volver a contratarlos cuando ya tengas la liquidez que estás buscando. Por ejemplo, si tienes internet de 600 y sabes que no usas tanta velocidad, puede ser una buena opción bajar a 100 y reducir el precio. Seguro que si buscas encontrarás más de un gasto que puedes eliminar o reducir.