A la hora de crear, ¿en qué se piensa antes, en el diseño o en la funcionalidad? Es cierto que últimamente parece que los diseñadores enfocan más sus productos al diseño olvidándose del papel fundamental de sus creaciones, pero antaño las motivaciones eran otras. Y la lámpara que vamos a ver hoy es un claro ejemplo de ello.
En el año 1940, Jean-Louis Domecq se lanza a la fabricación de una lámpara especial para sus necesidades ya que en el mercado no encontraba ninguna que reuniera esas características. De esta manera tan peculiar nace una de las creaciones emblemáticas del diseño francés.
No es hasta casi 10 años después que Domecq tiene lista la lámpara perfecta. Simple, robusta y articulada, la lámpara se adapta perfectamente a la función buscada.
La lámpara es tan práctica y su diseño tan acertado, que en los años siguientes se animan a industrializar su fabricación. Y el resultado es más que conocido por todos.
La lámpara Jieldé ha ido evolucionando con el paso de los años, ha ido adaptándose, y desde aquel momento no ha dejado de fabricarse.
Actualmente este modelo de lámpara no es sólo uno de los más prácticos y funcionales del mercado, sino que se ha convertido en todo un referente en el diseño industrial y su diseño ha inspirado a infinidad de nuevas creaciones.
Por ello hoy hemos querido rendirle este modesto homenaje a la lámpara Jieldé. Y para ponerle el broche final cerraremos con una cuidada galería de imágenes en las que podremos ver algunos de los modelos más destacados que se han fabricado de la lámpara que un día creara Jean-Louis Domecq.